¿Eres de rrhh? ¿De People? ¿Un CHO?
Pues atiende porque te voy a contar en un único correo lo que tienes que hacer para fidelizar el talento.
Número uno: asegura que la gente tiene un salario decente.
He trabajado en sitios que hacían auténticas piruetas estadísticas para demostrar que se estaba pagando a la gente “en línea con el mercado”. Spoiler: el mercado pagaba más.
Si no puedes pagar más, dilo. Si te sientes incómodo en un sitio que paga poco y eres de rrhh y te incomoda reconocerlo y que la gente se vaya, vete tú: en una empresa donde se paga por debajo de mercado no hay fruta fresca gratis en el office que retenga la salida de la gente.
Número dos: escucha a la gente.
Me da igual que montes un proceso de la leche que garantice un análisis 360, que tus encuestas de clima laboral indiquen que todo va bien, me importa un bledo si eres incapaz de sentarte con nadie para tener una conversación. Que no tengas capacidad para hablar con todo el mundo no significa que tengas que encerrarte en un bunker de datos para no hablar con nadie.
Si no hablas con la gente te estás perdiendo la información realmente valiosa.
Número tres: dale a la gente lo que quiere…
O al menos dile que no puedes dárselo. ¿Sabes lo que quiere la mayoría de la gente, aparte del punto número uno?
Formación.
Así que si la gente te pide formación, no ofrezcas yoga o mindfulness. O cuántales que no tienes ni pasta para subir salarios ni para formarles de forma decente. En ese caso, de nuevo, igual es momento de preparar una maleta.
¿Hay mayor evidencia de que quieres que la gente se quede que darles lo que quieren?
Pues eso.
Número cuatro: monta un proceso que incentive a los audaces
El dinero, sentirse escuchados y ver que se valora a la gente formándoles (o dándoles algo que quieren), esas tres cosas gustan a todo el mundo.
Pero a unos pocos (a ti, valiente lince trotón) no les basta. A esos, a los que tienen ansia de escalar la pirámide trófica corporativa, a esos les tienes que ofrecer un plan. Un plan realista donde no solo se pinten las etapas del ciclo sin fin que lo envuelve todo, un plan donde se diga qué tiene que pasar para que la gente suba peldaños.
Una parte importante del plan es entender qué posiciones de liderazgo vas a ir necesitando con el tiempo: si creces un 50% en ingresos, es posible que necesites aumentar tu plantilla un 30% y un 25% las posiciones de liderazgo (los números son invent, no te los tatúes).
Si tu empresa decrece, ten claro que las nuevas posiciones sólo se abrirán si hay salidas.
De nuevo, pintar un plan irreal lo único que va a conseguir es que el joven Simba abandone la empresa antes de que le crezca la melena.
Número cinco: sé coherente, joder.
Todo lo anterior no vale de nada si no eres capaz de ser honesto. A todos nos gusta estar en un sitio que cuida de la gente, pero cuidar de la gente no es pintar una frase atribuida a Einstein que parece sacada del azucarillo del café, ni tampoco es montar un curso de técnicas de respiración para disminuir el estrés.
Sé incoherente y la gente saldrá espantada en cuanto vea el primer bote salvavidas.
Pues ya estaría el correo. Hala, ya sabes lo que tienes que hacer.
Deberían obligar a los RRHH a leerte
Make "Head of Movidas" Great Again! Ojalá que se cumpliese todo lo que propones